Qué dijo Barclays sobre la vuelta de Lula a la presidencia de Brasil
El economista Roberto Secemski proyectó qué podría suceder con la política brasileña luego de que Jair Bolsonaro perdió las elecciones presidenciales.
Ayer por la noche, se dio a conocer que Lula da Silva será el próximo presidente de Brasil a partir del 2023 luego de ganarle a Jair Bolsonaro en una instancia de balotaje, con cerca del 51% de los votos.
Entre las decenas de análisis poselecciones, se destacó el del banco de inversión Barclays, escrito por el economista Roberto Secemski, quién proyectó qué podría suceder con la política del país.
"Creemos que finalmente se producirá una transferencia pacífica del poder. La mayoría de los actores políticos y económicos no han respaldado las afirmaciones de Bolsonaro, no mostrando ningún apetito institucional por embarcarse con él en un camino disruptivo", comentó el especialista.
"Así lo pusieron de manifiesto los discursos públicos de los titulares de la Corte Suprema, el Tribunal Electoral y el Congreso tras la publicación de los resultados electorales. En ocasiones, el presidente ha bajado el tono de su propia retórica al decir que aceptará los resultados siempre que las elecciones 'sean limpias'", añadió.
Si bien las acciones brasileñas se negociaron a la baja en la rueda premercado de hoy, luego recuperaron y actualmente se encuentran positivas en su mayoría: el índice MSCI Brazil acumula una suba del 2,8% en lo que va de la jornada.
"Creemos que Lula podría anunciar algunos nombres como parte de su equipo de transición en los próximos días, pero puede tomar más tiempo hasta que los nombres clave finalmente se confirmen como ministros", aclaró el experto.
Y mencionó: "Si bien en 2002 Lula solo confirmó su gabinete más de un mes después de su victoria (incluido el entonces ministro de finanzas Antonio Palocci a principios de diciembre), esperaríamos que eso suceda antes esta vez, en las próximas una o dos semanas dependiendo de las negociaciones entre el presidente electo, su coalición y los partidos de centro en el Congreso".
Asimismo, pronosticó que la oposición abierta al nuevo "presupuesto secreto" podría poner a Lula en un rumbo de colisión si los líderes del Congreso son reelegidos por sus pares para otro mandato de dos años el próximo febrero.
"Encontrar un equilibrio que funcione para todos en Brasilia requerirá extensas negociaciones, algo que podría resultar en un período de luna de miel más corto para el presidente electo", añadió Secemski.
Finalmente, concluyó: "En resumen, un conjunto de herramientas limitado para negociar con el Congreso podría en última instancia frustrar las ambiciones de reformas de Lula, en particular las constitucionales".