Inflación Argentina estaría cerca del 130% en 2023, según EcoGo
Analistas privados coinciden en una inflación por encima del 100% mientras el gobierno insiste con una proyección cercana al 60% en el presupuesto
Mucho se ha discutido sobre la inercia inflacionaria que se está desarrollando hace tiempo en Argentina y sobre el nivel que alcanzaría tanto en 2022, como en 2023. Si bien en este año llevamos una inflación acumulada del 66% hasta septiembre y un 83% medida de forma interanual, el presupuesto del 2023 proyecta una inflación cercana al 60%.
Según un nuevo informe de la consultora EcoGoS, se proyecta que la inflación en Argentina alcance un máximo por arriba del 130% para 2023, rompiendo con cualquier pronóstico realizado por consultoras.
Argentina ya tiene una de las tasas de inflación más altas del mundo y el pronóstico de EcoGo, encabezado por la directora ejecutiva Marina Dal Poggetto, es más del doble de la inflación del 60% que el Gobierno proyectó en su presupuesto para 2023. En su informe indican que esa diferencia puede ser debido a que el próximo año hay elecciones y los votantes se encuentran muy preocupados por la situación económica del país, por lo que intentan calmar las expectativas.
Dal Poggetto anticipa que la inflación interanual alcanzará los tres dígitos en diciembre y luego tocará un máximo de alrededor del 132% en junio, impulsada por un rango de factores, entre ellos la sequía que eleva los precios de los alimentos.
La economista también estima que la tasa de inflación mensual de Argentina se aceleró en octubre a 6,6% desde 6,2% en septiembre impulsada por aumentos en los precios de los planes de salud, esparcimiento y ropa. "No se espera que los aumentos de precios mensuales caigan por debajo del 6,5% hasta al menos septiembre de 2023", señalan en el documento.
Presupuesto 2023 proyecta un 60%
El proyecto de Presupuesto 2023 presentado por el Poder Ejecutivo contempla un gasto total de casi 29 billones de pesos, un crecimiento de la economía del 2%, una inflación proyectada del 60%, un tipo de cambio de 218,90 pesos por dólar, y una reducción del déficit fiscal del 2,5 al 1,9 %.
Un punto clave está relacionado con la inflación: el oficialismo aceptó una “cláusula gatillo” para que se revise, a fines de agosto, próximo las cifras proyectadas. Si exceden en un 10% lo pensado para ese momento, o si se supera el 10% de recursos, el Ejecutivo deberá enviar un proyecto al Congreso para que, en un mes, se defina la redirección de gastos. Si no ocurre eso, el Gobierno lo hará vía Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU).
El dictamen de mayoría contiene reformas impositivas ya que se contempla aumentos en las cuotas de obra social para las categorías más altas del Monotributo, incremento de impuestos internos y de aranceles de productos electrónicos, un impuesto sobre los pasajes y deducciones de ganancias en concepto de educación.
Otro punto significativo es la inclusión de una cláusula, por la cual si aumenta la recaudación o la inflación prevista del 60% en 2023, se deberá implementar una corrección en el Presupuesto, a fin de establecer cómo se redistribuirá ese excedente de los recursos