¿Son las armas no letales una alternativa viable para combatir la delincuencia?
A pesar de la gran polémica que las pistolas taser provocaron en la Ciudad de Buenos Aires, la intendencia de Lanús avanza en la compra de pistolas y fusiles no letales que disparan gas pimienta.
El secretario de seguridad de Lanús, Diego Kravetz, anunció que los policías locales del municipio, comenzarán a ser capacitados en el uso de una nueva arma fabricada por la empresa Bersa.
El modelo es el Byrna, viene en dos formatos, pistolas y fusiles de asalto, ambos funcionan por aire comprimido y sus cargas son no letales. La pistola, tiene un valor cercano a los 250 mil pesos en armerías, y no requiere registro en la ANMAC. La decisión fue tomada el día de hoy por el intendente interino y secretario de seguridad Diego Kravetz, en la Escuela de la Policía Local, ubicada en Gerli.
Kravetz aseguró que a “las armas hay que probarlas en la calle. Las probé personalmente, son útiles para nosotros”. Las armas son solo para la policía municipal de Lanús, el funcionario hizo hincapié en que "la primera respuesta de un policía no sea disparar con plomo".
También dio un contexto de la situación que se vive día a día en Lanús: “Yo estoy en un distrito con 500 mil personas. Hay 37 villas. En Lanús, las persecuciones policiales terminan en barrios populares, donde hay chicos. Un móvil policial que opere en el Conurbano no puede no tener armas no letales. No usarlas es una locura. Cuando voy a detener a alguien y salen los vecinos a tirar piedras para defender al sospechoso, ¿Qué hago? ¿Voy a tirar con una 9 milímetros para repeler la agresión? Termina con un vecino muerto y el policía imputado por homicidio en exceso de legítima defensa, u homicidio directamente”.
“En este contexto, estamos buscando alternativas menos peligrosas y que tengan una cuota de efectividad”, y continuó el funcionario: “Estamos buscando proteger la vida de los vecinos, de los delincuentes y de los efectivos”.
Por último culminó asegurando que las armas tipo Byrna son de fabricación nacional y los precios son considerablemente menores que los de una pistola taser.
A pesar del escándalo provocado por nación a la Ciudad de Buenos Aires por las taser, El año pasado, el Ministerio de Seguridad de la Nación encabezado por Aníbal Fernández inició un proceso administrativo para comprar cien armas taser, con su correspondiente kit de accesorios, cartuchería y licencias, por un monto total de 293.490 dólares.